Vo Mimbre: Descirpcion.

Tema: Vo Mimbre: Descirpcion. Sáb Feb 23, 2008 2:20 pm

La ciudad de Vo Mimbre se alza casi como una montaña a la vera de un río espumoso. Sus altos gruesos muros terminan en enormes almenas y en el interior se levantan grandes torres y delgados capiteles coronados con banderas que brillan bajo la luz dorada del sol de las tardes. Cuando te acercas a las murallas distingues en los muros señales de las rocas que los angaraks habían arrojado con sus catapultas. ¡Sobre aquella roca la marea de los angaraks se estrelló, retrocedió y volvió a estrellarse! El alma y el honor de Arendia residen dentro de este fuerte. Más arriba, las almenas están desconchadas y picadas por el impacto de lluvias de flechas con puntas de acero. La arcada de piedra que conduce a la ciudad revela el increíble grosor de las paredes y el portón de hierro es enorme. Las calles son estrechas retorcidas y los que circulan a tu lado son en mayoría plebeyos que se hacen a un costado con presteza.

El Palacio se alza hacia el centro del a ciudad, con numerosas ventanas. La sala del trono es una habitación enorme y abovedada con contrafuertes esculpidos que se alzan sobre las paredes. Entre los contrafuertes hay ventanas altas y estrechas y la luz las engalana al colarse a través de los vitrales de colores. El suelo es de mármol pulido y al fondo, sobre una plataforma de piedra alfombrada, se encuentra el doble trono de Arendia, con una pesada cortina púrpura a su espalda. A un lado de la cortina están colgadas las armas antiguas de veinte generaciones de la realeza arendiana. Lanzas, mazas y enormes espadas, más altas que cualquier hombre, lucen entre las banderas harapientas de reyes olvidados.

Los habitantes de la provincia de Vo Mimbre, son los caballeros y el grupo que ostenta el poder en Arendia. Poderosos barones y caballeros de la corte, la mayoría de señoríos poderosos son suyos. Siguen y respetan el mismo código de moral y honor que los asturios, a fin de cuentas todos son arendianos.
Son poco inteligentes, y poseen opca capacidad de comprensión , con el especial añadido de que un mimbrano nunca tiene miedo. “Un mimbrano con miedo es como un perro que habla”. Los mimbranos son también algo más fuertes que sus parientes asturios y algo más grandes, y es que aparte del mejor equipamiento en batalla También son más carismáticos, pues su forma de hablar, sus modales y su pretendido aspecto siempre pulcro les hacen levantar el respeto o el odio de los demás.

Y muy importante es su forma de hablar, pues son muy ceremoniosos. El lenguaje en Mimbre está compuesto siempre por “vos”, “vuestro” y palabras llenas de florituras y adornos, sin ser malsonantes. A cualquiera que no conozcan y no les hable así no le harán caso si no es por interés propio. Del mismo modo, encontramos que las ceremonias empalagosas, los bailes y todo lo melindroso y dramático les encanta y siempre verán una ocasión para ello. Del mismo modo, son amantes de lo trágico, por lo que los cuchicheos sobre relaciones y las tragedias del amor cortés o no correspondido están a la orden del día.

Los mimbranos sienten un odio muy similar al de sus compatriotas asturios hacia ellos, pero este se ve salpicado por la superioridad creída de estos frente a sus vecinos y una arrogancia petulante que se refleja en su mismo lenguaje. Además, el hecho de que los monarcas de Arendia sean prácticamente mimbranos les otorga mayor seguridad.